Egiptomania.com, es un portal de Egiptologia en el que puedes encontrar amigos interesados en el antiguo Egipto, sus faraones, piramides, tumbas, momias, escritura jeroglifica, mitologia, ciencia, historia, arte o geografia, y ademas puedes inscribirte en su lista de distribucion de correo y recibir constante informacion sobre Egiptologia.Las CanterasPirámides del Antiguo Egipto: Las grandiosas tumbas faraónicas egipcias

 

 El sistema principal para la extracción de bloques de piedras en las canteras egipcias, parece haber sido el cincelado, pero fueron múltiples los sistemas utilizados. Para cada tipo de cantera y de piedra, unos sistemas eran más adecuados o rápidos que otros.

 Los bloques que han quedado en las canteras, están marcados por las vigas que, a forma de palancas, se utilizaban para separarlos de la roca madre. Pero hay varios tipos de marcas en las canteras, que describen el método utilizado para trabajar la roca en cada caso.

 Se han conservado representaciones de la elaboración de bloques por cincelado. La ilustración muestra cómo cincelaban, medían y nivelaban los bloques.

 Los cinceles utilizados en el Imperio Antiguo, eran de cobre, aunque más duro que el cobre puro, puesto que de la mezcla con impurezas, a veces resulta una aleación de dureza cercana a la del bronce.

 Seguramente la aleaciones eran accidentales, los egipcios sólo sabrían que el cobre extraído de ciertas zonas, era más duro y por eso lo preferían para ciertos trabajos. Del mineral mezclado y fundido con rocas de la zona, resultarían las aleaciones fortuitas. Pero ya a finales del Imperio Antiguo, hace su aparición el bronce.

 Los cinceles eran golpeados por mazas de madera como la de la fotografía y podían utilizarse en rocas más duras que los primeros, puesto que lo que se pretende es comunicar el impacto a las mismas, no penetrarlas por dureza. Pero tanto el cobre como el bronce, resultaban poco eficaces para trabajar las rocas más duras como el granito.

 Sierras, andamios, cuerdas, balancines, trineos, etc., son otras herramientas utilizadas en las canteras para la extracción y transporte de los bloques.

 El tamaño de los cinceles aumenta con el tiempo, siendo de hasta 50 cm y de hierro ya en época tardía, que dejaban marcas alargadas y paralelas. Las marcas cortas de los cinceles de cobre del Imperio Antiguo, permiten datar fácilmente la época de explotación aproximada de una cantera.

 Las piezas eran labradas in situ, al menos un esbozo primario antes de transportarlas.

 La razón para esto era preventiva, ya que se podría perder mucho tiempo y esfuerzo si la roca utilizada terminaba por romperse en esta primera fase.

 El primer esbozo es precisamente la fase que permite observar los posibles defectos del bloque en bruto.

 Muchas piezas fueron abandonadas en la misma cantera, ya sea por rotura o por encontrar zonas de mala calidad en la roca.

 Canteras cubiertas formando túneles: son comunes las de arenisca y calizas. Al ser rocas sedimentarias, es fácil encontrarlas formando estratos.

 Los estratos eran marcados con ocre y siempre se explotaban solamente los de mayor calidad. Se comenzaba por arriba cincelando hasta dejar hueco para una persona.

 Se comenzaba la penetración de la roca por las zonas separadoras de los estratos, que son mucho más blandas y permitían una extracción rápida con las caras con apariencia prácticamente pulimentadas en muchos casos.

 En la actualidad se han retirado la mayoría de los detritos que contenían estas canteras, para poder estudiarlas mejor.

 Canteras a cielo abierto: en los casos en que las rocas de mejor calidad se encontraban muy cerca de la superficie, la cantera podía explotarse a cielo abierto.

 Las formas, a veces de aspecto aparentemente caprichoso, son debidas a la búsqueda de la roca más apropiada para el objetivo al que estaba destinada.

 Tras el cincelado de los bloque, éstos eran separados de la roca madre a la altura de un estrato, mediante la introducción de cuñas.

 Algunas oquedades realizadas en las rocas, parecen haberse utilizado para ayudarse en la extracción y transporte de los bloques, mediante la inserción de cuerdas por las mismas y utilizándose a modo de poleas.

 Las canteras también contienen agujeros realizados para insertar en ellos los andamios de madera, que les permitían trabajar a grandes alturas.

 Para la explotación del granito y otras rocas de mayor dureza, se solían utilizar herramientas de dolerita. La dolerita es una roca de gran dureza y resistente a los impactos. El desgaste de las mazas de dolerita, daban lugar a las bolas que se han encontrado en la canteras.

 Las bolas de dolerita también se podían usar para desgastar manualmente las rocas en un proceso posterior de modelado de las mismas. Las marcas de cuñas, encontradas tanto en granito como en calizas, son de época tolemáica o posterior. Dichas marcas eran cinceladas, lo cual demuestra que sin lugar a dudas, los cinceles (de hierro en este caso) pueden utilizarse con el granito, aunque no fuese el sistema favorito de los egipcios del Imperio Antiguo, ya que el proceso con el cobre es más lento, pero más que posible y utilizado principalmente sólo en fases posteriores de refinado de las piezas.

  La utilización de herramientas de dolerita, con las que golpeaban el granito, deja unas marcas onduladas y suaves características, por el desprendimiento de lascas tras los impactos.

 El ejemplo más típico de este tipo de marcas, lo encontramos en el famoso Obelisco Inacabado de las canteras de Asuán, donde además se han encontrado infinidad de bolas de dolerita por la zona.

 Sierras de cobre con el filo impregnado de cuarzo en polvo, también se utilizaban en el Imperio Antiguo, incluso con las rocas más duras como el granito rojo del sarcófago de la fotografía, que se encuentra en el Museo Egipcio de El Cairo.

 En la base se hizo la tapa del sarcófago, que luego se intentó separar cortándola con dos sierras, una a cada lado. Ambos cortes pueden distinguirse en la fotografía superior.

 La imagen muestra claramente uno de los motivos del abandono de la pieza en cuestión. No se llegó a terminar porque los artesanos se desviaron demasiado al intentar separar la tapa de la base del sarcófago. El desvío debió producir la rotura de la misma.

 En un primer plano del corte superior, podemos observar las irregularidades del mismo. Unas marcas laterales en ocre y apenas visibles hoy día, marcan la zona por la que la roca fue vaciada en su interior, para dejar el hueco del sarcófago. Toda la zonas exteriores e interiores llegaron a pulimentarse.

 Si lo miramos desde arriba con una luz que nos permita verlo, las sombras delatan la presencia de las marcas ocasionadas por la sierra de cobre y filo reforzado con cuarzo.

 El detalle del punto de ruptura, además de reflejar perfectamente las marcas de la sierra, nos muestra que primero se serró la parte inferior (derecha en fotografía) y después la superior. Precisamente la que se hizo incorrectamente y derivó en la rotura de la tapa; punto en el que se abandonó definitivamente el sarcófago. 

Conclusión:

 Las pruebas encontradas en las canteras egipcias, no dejan lugar a fantásticas teorías sobre "reblandecimiento de rocas", "creadas a partir de una mezcla de componentes químicos" o "cortadas con un láser". Las técnicas egipcias se nos muestran claramente en estos restos, que pueden leerse como un libro abierto por quien desee hacerlo.

 

Autor: Juan de la Torre Suárez

 

Apúntate a la lista de correo de Egiptomania.com

© Juan de la Torre Suárez
Todos los derechos reservados.
Aviso Legal

Haz de Egiptomania.com tu página de inicio