| El
      Cuento o Historia de Sinuhe Traducción
      de Pedro M. Gómez   B252
      a B256m 
   B252.-
      gm.n.i Hm.f Hr st wrt m wmt nt Damw wn.kwi rf
      
       Encontré
      a Su Majestad en el gran trono de la puerta de oro fino. Yo estaba 
      
       B253.-
      dwn.kwi Hr Xt.i xm.n wi m bAH.f nTr pn
      
       extendido
      sobre mi vientre. Me desvanecí en su presencia. Este dios
      
       B254.- Hr wSd (w)i xnmw iw.i mi s itw m axxw
      
       se
      me dirigió de modo amigable. Yo era como un hombre cogido en el crepúsculo.
      
       B255.-
      bA.i sbw Haw.i Adw Haty.i n ntf m Xt.i rx.i
      
       Mi
      alma estaba débil, mi cuerpo tembloroso, mi corazón no estaba en mi
      cuerpo, no discernía
      
       B256.- anx r mwt Dd in Hm.f n wa m nn n smrw Ts
      
       la
      vida de la muerte. Entonces Su Majestad dijo a uno de estos oficiales:
      “Levántale
      
        
      
      
      
       B256m
      a B261  
   B256.- anx r mwt Dd in Hm.f n wa m nn n smrw Ts
      
       la
      vida de la muerte. Entonces Su Majestad dijo a uno de estos oficiales:
      “Levántale 
      
       B257.-
      sw imi mdw.f n.i Dd in Hm.f mk tw iw.t(i) Hwi.n.k xAswt ir.n warwt
      
       Y
      permite que me hable”. También dijo Su Majestad: “Mira, tu has
      venido, dejaste atrás las tierras extranjeras después de tu huida.
      
       B258.-
      hd im.k tni pH.n.k
      iAwy
      nn Srr abt
      
      
       La
      vejez prevalece en ti, has alcanzado la senilidad. No será poca la adhesión
      
       B259.-
      xAt.k nn bs.k in pDtyw m irr.k sp-sn gr n mdw.k
      
       a
      tu cadáver; no serás sepultado por los asiáticos; no actúes así más
      (dos veces); no has hablado cuando
      
       B260.-
      dm.tw rn.k snD.n.i n xsf wSb.n.i st m wSb
      
       fue
      pronunciado tu nombre”. Temí el castigo. Yo respondí a esto con la
      respuesta
      
       B261.-
      snDw ptr Ddt n.i nb.i ir wSb.i st nn irt.i
      
       del
      hombre temeroso: ¿Qué me dice mi señor?. Si yo pudiera responder a esto
      pero no puedo hacerlo.
      
      
      
       |